«Hay una invisibilización de la pobreza desde las instituciones y los medios de comunicación. Y, además, las propias personas pobres se autoinvisibilizan también porque nadie va por ahí diciendo ‘hola, soy pobre’. La gente pobre no muestra su situación e incluso le cuesta solicitar ayuda o apoyo», explica Joseba Martínez, trabajador autónomo afectado por los recortes del Servicio Vasco de Empleo y miembro de Berri Otxoak, Plataforma contra la exclusión social y por los derechos sociales que acaba de cumplir 25 años de lucha a pie de calle.
La situación real de la pobreza no es la que se nos vende desde las instituciones», denuncia Joseba Martínez, de Berri Otxoak. «En nuestra oficina de Barakaldo en el curso pasado ha sido cuando más consultas hemos tenido y eso sí nos muestra que la situación real es otra, que no coincide con lo que se nos vende. Desde los gobiernos se da un mensaje positivo, por ejemplo que las cifras del paro están bajando, pero el tema central es que el trabajo que se está ofreciendo es cada vez más precario y nos encontramos en la situación de que la gente aún teniendo un empleo no sale de la pobreza. Mucha gente aún cree que por tener un empleo ya no es pobre pero lo que estamos viendo es que hay muchos empleos precarios, jornadas parciales, salarios bajísimos… que lo que hacen es que muchas personas tengan que complementar sus salarios con una Renta de Garantia de Ingresos (RGI) o con unas Ayudas de Enmergencia Social».
La Carta de Derechos Sociales de Euskal Herria, a través de personas usuarias del Servicio Vasco de Empleo y perceptoras de la RGI,han denunciado este martes, Día internacional para la erradicación de la pobreza, ante el Parlamento Vasco que las políticas antisociales que se vienen aplicando desde el Gobierno Vasco están dando lugar a un empobrecimiento generalizado de la mayor parte de la población, favoreciendo, por el contrario, el enriquecimiento de una minoría.
La propia Encuesta de Pobreza y Desigualdades Sociales del Gobierno Vasco señala que la pobreza grave se enquista y afecta ya a 104.177 personas, el 4,9% de la población de Euskadi. Se trata del porcentaje más alto desde que se realiza este estudio. En riesgo de pobreza se encuentran otras 350.668 personas, el 16,5% del total. Por otro lado, las situaciones de pobreza de mantenimiento afectan a un 7,1%, 151.112 personas. Mientras que las dificultades para llegar a fin de mes se eleva al 18,4%, lo que supone 394.266 personas afectadas.
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