«Hay muchas guerras que son muy nuestras. La guerra empieza aquí, evidentemente. Las guerras las sufren en otros países, la gente fuera, pero nuestros bancos son quienes financian las armas que luego se usan en esas guerras y provocan que las personas refugiadas vengan aquí», denuncia Julene Eiguren, integrante del colectivo Armiarma Talde Feminista Antimilitarista. … Sigue leyendo