«En el principio fue el juego», certifica el poeta Francisco J. Uriz y comienza el encuentro, «rueda la pelota, nuevo flautista de Hamelín que arrastra a todos los niños del mundo». Jugar es vida, jugar es balón. Entra, chuta y disfruta con este fascinante poema sobre la magia del juego de la pelota.
El juego por el juego
En el principio fue el juego.
Desafiantes cuerpos
campan por sus respetos.
Imantados por la pelota corren tras ella
en jubilosa diversión.
La cogen la pasan (apenas) regatean la pierden
corren se caen se levantan la vuelven a coger chutan
saltan gritan se zancadillean.
Rueda la pelota nuevo flautista de Hamelín
que arrastra a todos los niños del mundo.
Por todas partes
niños desaforados y titubeantes
en un goce hegemónico del cuerpo en movimiento.
Niños tras pelota de trapo, de goma, balón
o cualquier objeto pateable
jugando como cachorrillos
que disfrutan de sus primeros pasos:
jugar es vida.
Afirmación de los cuerpos
vivificados por el balón.
Fascinación por la pelota
elementales alegrías físicas
disfrute de la convicción del cuerpo
que regala una esfera de cuero.
Jugar es balón.
Francisco J. Uriz
Comentarios
Aún no hay comentarios.