«Hace falta en Bilbao y alrededores un espacio de poesía de conciencia crítica, de utilizar la poesía como un cuestionamiento del mensaje ideológico del poder establecido, discutir ese mensaje y utilizar esa poesía como una herramienta de transformación», afirma el poeta Pablo Muller (Bilbao, 1961), uno de los impulsores del Colectivo ZOK (Zebagaitz Olerki-Kolektiboa), que se presenta este viernes en la capital vizcaína. ZOK es «un proceso social, abierto y comunitario» desde el que «tejer redes para el conocimiento de poesías abiertas y poetas que siguen soñando que otro mundo es posible».
«Como decía Mayakovski, ‘el arte, y dentro del arte, la poesía, no es un espejo para reflejar el mundo sino un martillo con el que golpearlo’, y esa es un poco nuestra idea al crear ZOK, lo que buscamos, a pesar de las fronteras y de las distancias, es ver nuevos horizontes y crear un espacio donde esa poesía que nos invita a pensar cinco minutos más allá de la realidad cotidiana tenga un lugar en el que poder expresarse. Buscamos lugares de encuentro donde mirarnos a los versos y reconocernos en otras voces. Para que poetas de aquí y allí, más o menos conocidas, nos inviten a pensar, nos inunden de preguntas y dudas, iluminando el camino con la buena luz que come sombras, sembrando la esperanza y la utopía», cuenta el poeta Ibon Zubiela (Bilbao, 1975), promotor también de este nuevo colectivo poético insumiso.
«En Euskalherria existen dos realidades poéticas, las dos muy ricas y muy diferenciadas, que no se tocan, incluso ni se miran», afirma el poeta Ibon Zubiela, y desde ZOK «queremos confluir, tender puentes entre dos mundos hermanos y que conviven sin casi conocerse. Hoy en Euskal Herria, la poesía en euskera y en castellano son dos realidades paralelas, que deben buscar espejos donde reconocerse y entenderse con sus diferencias».
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