«La primera palabra que me viene a la cabeza es la de sorpresa. No esperábamos por nada del mundo que hubiera tanta movilización y tantas referencias en los medios de comunicación a la semana por el clima», confiesa Jon Hidalgo, de la Fundación Lurgaia. «Así que sentimos mucha satisfacción, sobre todo porque hace 10 años estas movilizaciones habrían sido casi imposibles y hoy en día a los pesimistas nos han echado encima un chorro de luz. Veremos en qué acaban pero por de pronto se ve algo al fondo del tunel. Así que estamos contentos y soprendidos a la vez», añade este veterano ecologista. Por su parte, Itxaso Apraiz, de Euskal Gune Ekosozialista, destaca que «hemos podido constatar que la juventud se está empezando a movilizar tras años de desmovilización. Últimamente sólo se veía a las chicas jóvenes participar en marchas y protestas, sobre todo en el ámbito de la lucha feminista. Y los chicos parecía que estaban adormilados. Pero ahora parece que la situación va a cambiar y estamos esperanzadas». Por último, Gorka Llantada, de la Plataforma Güeñes Bizia, señala que «cometeríamos un grave error como sociedad si pensamos que esto lo van a solucionar los políticos. No va a ser así. Si el planeta depende de lo que hagan ellos tenemos pistas suficientes para saber lo que va a pasar. A mi me parece que desde 1960 hasta 1990 no hemos nacido más que idiotas. Si ahora ves todos los movimientos que hay en la calle son fundamentalmente de jóvenes y gente mayor. Mi generación, no sé si es porque hemos vivido la mayor época de bonanza de la historia, al menos en esta parte del planeta, hemos venido aquí a vacilar y seguramente ya no queda tiempo, hemos agotado hasta la capacidad de vacilar. El 90% de la gente que había en la huelga del clima del otro día ya no tiene tiempo para vacilar. Y posiblemente por eso tendrán que actuar de otra manera y espero que no cometan el error de delegar un problema tan serio y una emergencia tan brutal en gente que hace mucho tiempo que ha demostrado que no tiene ninguna capacidad para solucionarlo. Espero que los jóvenes escuchen a la ciencia y a partir de lo que dice la ciencia sean imaginativos para inventar de qué forma podemos hacer algo, porque no va a ser delegando en los políticos».
En Mar de Fueguitos hemos organizado esta charla en torno a la emergencia climática en la que también participan, además de Jon Hidalgo, Itxaso Apraiz y Gorka Llantada, Nuria Atienza, del colectivo Nasti de Plastic Bizkaia, y Doltza Nogal, del grupo de voluntariado de Greenpeace Bizkaia.
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